Con la digitalización financiera, nunca fue tan fácil realizar una compra como en la actualidad. En un abrir y cerrar de ojos ¡pum! Eso que tanto querías te llega en cuestión de horas.
Ahora bien, con el auge de las billeteras virtuales se suman nuevos conceptos como por ejemplo, el CVU. Quizás ya te suenen otras palabras como CBU o alias pero ¿qué significan todas ellas y en qué se diferencian? En este artículo, te vas a familiarizar con estos términos que simplifican nuestra vida cotidiana.
CBU y CVU: un "DNI" para tus finanzas
Al igual que el huevo y la gallina, ¿quién habrá llegado primero a nuestras vidas? Pues bien, la respuesta es la Clave Bancaria Uniforme o CBU. Este código de 22 dígitos es algo así como el DNI de tu cuenta bancaria, el cual te asigna tu banco y no se puede cambiar.
De acuerdo al Banco Central de la República Argentina, los primeros tres dígitos del CBU corresponden a la entidad. Entre el cuarto y el séptimo dígito indican la sucursal en la que está radicada la cuenta. Por su parte, el octavo y el vigésimo segundo número, son dígitos verificadores. Finalmente, los dígitos que están entre la novena y la vigesimoprimera posición corresponden al número de cuenta.
Para saber cuál es tu CBU, podés consultar en un cajero automático, por homebanking o de manera presencial en tu banco.
Por otra parte, la Clave Virtual Uniforme o CVU surge con la llegada de los servicios financieros sin necesidad de ser bancos (tales como las fintech). También posee 22 dígitos, con la diferencia que estos son brindados por un Proveedor de Servicios de Pago (PSP).
Entonces, el CVU permite recibir y enviar dinero a través de una billetera virtual a un banco o entre aplicaciones fintech. Al igual que el CBU, este código no se puede modificar. El objetivo es facilitar los pagos electrónicos entre las personas, independientemente de si tienen o no una cuenta bancaria.
Cabe aclarar que si tenés Ohana, ¡tenés CVU! No te olvides de revisarlo en la sección de tu cuenta en la app.
Alias: el apodo canchero de tu cuenta
Muchas veces necesitás una “ayuda memoria” cuando te piden rápido tus datos para una transferencia. En estos casos, es mejor usar el alias. Esta clave alfanumérica funciona igual que un CBU o CVU, pero es mucho más práctica.
Sin embargo, si no te gusta el que te asignó tu banco, tenés la posibilidad de cambiarlo. Eso sí, no pueden haber dos alias iguales en el sistema financiero argentino.
¿Su ventaja? ¡Puede ser modificado de manera ilimitada! Por tu seguridad, te aconsejamos que no sean palabras demasiado simples, por ejemplo alias123. Esto te ayudará a evitar confusiones como transferencias a cuentas equivocadas.
¡Con esta info ya podés manejar tu plata por tu cuenta! Seguinos en redes para más consejos prácticos sobre finanzas 💪.